La próstata es una glándula que se encuentra en todo hombre y funciona produciendo secreciones que ayudan a la reproducción. El agrandamiento de la próstata es un problema de salud que se observa en aproximadamente el 50% de los hombres después de los 50 años. La incidencia de agrandamiento de la próstata alcanza el 80% después de los 85 años. Se ha demostrado que muchos factores como los factores genéticos, los mecanismos hormonales, los factores ambientales y la dieta pueden provocar el agrandamiento de la próstata.
Por lo general, causa quejas en la mitad de las personas con agrandamiento de la próstata. Por lo general, estas quejas se refieren a la micción. Quejas como dificultad para orinar, micción intermitente, esfuerzo al comenzar a orinar, sensación de quedarse adentro después de orinar, micción doble, ir al baño con frecuencia, levantarse más de una vez por la noche, incontinencia urinaria, necesidad urgente de orinar.
Aparte de estas molestias, los cálculos en la vejiga, sangrado en la orina, insuficiencia renal secundaria a la incapacidad para vaciar la orina, infecciones recurrentes del tracto urinario, cateterismo recurrente después de no poder orinar también pueden estar presentes en aquellos con enfermedad a largo plazo.
Las pautas aceptadas internacionalmente han combinado aproximadamente estas quejas bajo el nombre de síntomas del sistema urinario. La razón de esto es que estas quejas se pueden ver no solo con el agrandamiento de la próstata, sino también con otras enfermedades. Por ejemplo, la micción frecuente puede ser un signo de la aparición de diabetes. Las quejas como dificultad para orinar en las estenosis uretrales debido a traumatismos u operaciones previas del tracto urinario, orinar gota a gota o incluso no poder orinar en absoluto también pueden confundirse con quejas de agrandamiento de la próstata. Los traumas pasados, las lesiones de la columna vertebral y la alteración del sistema nervioso de la vejiga urinaria causada por algunas enfermedades neurológicas (nerviosas) también pueden causar estas molestias debido a la incapacidad de la vejiga urinaria para contraerse correctamente. Por lo tanto, en primer lugar, se debe realizar una historia detallada de los pacientes con estas quejas y se debe realizar un diagnóstico diferencial. También se pueden utilizar algunos cuestionarios que miden la gravedad de estas quejas.